Karen y Harry, son un primer amor hecho matrimonio, de los de lo libro. Con sus dos hijitos, él, muy volcado en su trabajo, ella muy volcada en sus niños y ocupada en sus labores. Es la hermana del Primer Ministro de Love Actually y ¡cómo no! prepara un disfraz para la Función del Navidad del famoso ya cole que reúne a todos nuestros amigos de “Actually”.
Pues eso, un matrimonio ideal, pero, llegan las interferencias, la secre del jefe, ¡qué típico!, ¿verdad?, pues va a ser que sí.”Mía”, la secretaria de Harry, se pasa toda la película insinuándosele, buscándole, pretendiéndole… es un mero trofeo de caza más para una buena cazadora, y el no se da cuenta del daño que va a hacer al primer amor de su vida, a su esposa, la madre de sus hijos.
Y se va dejando llevar, porque se siente sexi cuando ella se le “espatarra” literalmente hablando en la mesa de la oficina, o cuando reclama su atención para dar los últimos toques a la Fiesta de Navidad de la empresa que está preparando, o cuando le pide un “regalito”, especial para la Navidad, algo muy personal, un buen trofeo para su cruel cacería”.
Y él, cae como un bobo, como un estúpido, y pone en peligro todo aquello con lo que una vez juró ante el altar comprometerse. No llega al contacto físico, ni promete nada, da largas, solo un estúpido baile en la Fiesta de la empresa, muy pueril e insinuador, y que Karen tiene que presenciar haciéndola sentir bastante ridícula.
Pero, cuando ya lo hace fatal es a la hora del regalo de Navidad, a su esposa le compra con un cd de una reedición de su cantante favorito y a su ¿amante soñada?, le regala un collar de oro en forma de corazón.
Karen descubre el colgante del corazón en el bolsillo de la chaqueta de su marido y luego no cuando rasga el papel que envuelve su regalo de Navidad, se encuentra con el cd, ¿a dónde habrá ido a parar el colgante del corazón?. Amargamente, se retira en su cuarto, pone el cd, en marcha, y comienza a llorar, a llorar tan amargamente, que te duele tanto… Es terrible el dolor que te trasmite la actriz Emma Thompson, que encarna el papel de la esposa traicionada.
Es tal el dolor, que te hace pensar, que si me merece la pena darse por entero a alguien que un día se va a dejar llevar por sus instintos más básicos, sin medir la repercusión del acto que está realizando, que no es capaz de analizar el momento de debilidad que le está llevando a cometer algo de lo que se arrepentirá el resto de su vida.
La historia de nuestro matrimonio “Actually” se resuelve a caballo entre el Festival de Navidad del colegio y el aeropuerto.
Karen solo le pregunta, “tu ¿qué harías?, ¿te quedarías esperando para comprobar si el collar solo significa sexo, o si ese collar significa algo más que eso?…y si el collar significa amor…”
Y añado yo, y si no lo hubiera descubierto ella… el se hubiera liado con la secretaria como si tal, y ya está, ¿no?, afortunadamente no llega a pasar nada y todo sigue fluyendo, con ese bache, que cada uno de ellos vive de una manera distinta.
Ella, piensa que él la ha hecho sentirse ridícula por la vida que lleva, y el se siente, rejuvenecido, alagado y sexi, porque su secretaria le tira los tejos.
El amor, es como una planta , hay que regarla todos los días, ya que sino termina secándose.
Eva Robles comunicadora 